Invierno III
Hemos logrado tanto juntos no puedo más
de felicidad, pero después amanece y
no estás me haces daño, pasamos muchos
amaneceres solo abrazándonos desnudos
pero no sueles decirme nada vives del
silencio de observarme fijamente como
si estuvieras haciendo algo fundamental
que es muy conveniente seguir analizando
como si te vengaras de mi de parte de
una compañía de romance donde yo soy el
rey y tu no decides morir ese día
Comentarios
Publicar un comentario